El
yacón (Smallanthus sonchifolius) es una planta adaptada, de origen
andino prehispánico; sus raíces –un
tubérculo comestible– tienen un agradable
sabor dulce y una consistencia de fruta
similar a un melón–pera. El saber
ancestral atribuye al yacón propiedades
antidiabéticas, de alivio a problemas
gastrointestinales y renales, y
rejuvenecedores de la piel. Hoy se sabe que
la mayoría de los efectos positivos del
yacón son provocados por el alto
contenido de un azúcar especial: la oligo
fructuosa, que no se digiere en el
intestino humano y tiene tan solo la cuarta
parte del valor calórico del azúcar común.
Es excelente en el tratamiento de la
diabetes. Evita el estreñimiento y
previene el cáncer de colon; baja el nivel
de colesterol y triglicéridos en la sangre;
mejora la asimilación del calcio y ayuda a
prevenir la osteoporosis, a la vez que
fortalece huesos y dientes.
En Venezuela se conoce con el nombre “jiquima” y “jiquimilla”.
Dosis Recomendada
Como medicina alternativa
para la diabetes debe consumirse
aproximadamente 300 gr de yacón fresco al
día, porque ello permite consumir 66 gr de
fructosa inulina.
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